Querido niño Jesús…

Es justo en estas fechas cuando todos miramos atrás, hacemos balances, sacamos conclusiones… también miramos a nuestro lado… vemos a quienes nos acompañan y pensamos en los que ya no están… es como dice mi hermana el equilibrio santo de la vida que cada año nos quita y nos regala cosas para extrañar y agradecer…

Yo extraño muchas cosas este año…

A mi madre y mi padre… porque cada tarde nos sentábamos juntos a tomar café y hablar tonterías…

A mis hermanos… porque siempre estaban enseñándome cosas o dejando que fuese yo quien les enseñara… así fuese solo ortografía…

A mis sobrinas… Porque lograban hacerme sonreír cada día con sus ocurrencias, porque era fácil expresarles el cariño y porque me recuerdan la niña que aun soy

A mis amigos… Porque estaban ahí siempre que lo necesitaba, porque me escuchaban por horas darle vuelta al mismo tema y al final siempre había una sonrisa, una comida rica, una bebida o  un par de zapatos nuevo que cambiara mi ánimo… porque siempre teníamos una excusa para celebrar, un motivo para acompañarnos…

Mi ciudad… imperfecta, caótica y desordenada… pero mía... Ahí tenía un espacio y sabia a donde ir en cada momento…

Pero a pesar de tantas cosas que extraño… no puedo dejar de agradecer…

La oportunidad de recibir este año que casi se va con la familia completa… y el amor a una llamada

La generosidad de muchas personas que sin darse cuenta con sus detalles me allanó el camino para mi viaje…

Tu compañía al abordar ese avión, en ese viaje lleno de sueños, ilusiones, esperanza y mucho miedo… Sin ti, no habría podido hacerlo…

Tu apoyo.. Cuando baje del avión y me encontré cara a cara con mi destino… con ese hombre que me tiene en sus manos, que me domina, que puede destruirme o moldearme con una facilidad que no conocía… Tú apoyo cuando despertaba los primeros días fuera de mi casa y me abrumaban las emociones y las dudas.

Gracias  porque la distancia es la excusa perfecta para decirle a los míos que los Amo

Gracias porque a pesar de los kilómetros muchos siguen ahí… porque con sus letras me acompañan, porque con sus fotos me recuerdan y porque tienen detalles que me llenan el corazón de orgullo y de alegría…

Gracias por darle salud a mi gente… en especial a mis padres…

Gracias por darle trabajo a mi padre en estas fechas… sabes que de no ser asi para mi hubiese sido mil veces mas duro…

Gracias por regalarme un año lleno tantas emociones que aun hay momentos que creo estar soñando..

Gracias porque poco a poco esta ciudad se va convirtiendo en un hogar, porque voy conociendo sus espacios, reconociendo sus calles y escribiendo historias en sus rincones… porque cada vivencia deja una huella y esas huellas familiares me dan seguridad y fortaleza.

Gracias por las personas que has puesto en mi camino este año… por los conocidos que me hacen más fácil el día a día, por los amigos que van llegando y que quieren quedarse en mi vida… por las personas que me enseñan grandes lecciones con sus pequeños detalles y por aquellos que aun no llegan pero que estoy segura vendrán.

Gracias por El.. por ese príncipe tan real que me acompaña, por sus miradas llenas de amor, por su compañía, por su paciencia, por su respeto, por su seguridad y su compromiso… Gracias por el tiempo a su lado, por los días bueno y los que no han sido fáciles… gracias por mantenernos unidos a pesar de nuestras diferencias y gracias por esas diferencias que me hacen reconocerme humana e imperfecta y me renuevan mi compromiso por crecer.

Trato de extrañar y agradecer en la misma medida, para que se mantenga ese equilibrio que nos trae paz... pero la verdad hay días que gana la nostalgia y llegan las lagrimas y días en los que mirar a mi alrededor me llena de esperanza y sonrisas…

Hoy muchos de quienes me rodean desconocen la fe… creen que no combina con su estilo de vida… y yo (extraña como siempre) pienso que ha sido mi fe la que me ha hecho creer y entregarme como lo hago, porque no puedo vivir sin amor, sin la pasión en mis decisiones, en mis pasos, no puedo caminar sino creo en mi camino.

Para mi no eres abstracto.. aunque te transformas dia a dia y muchas veces es un gran trabajo reconocerte… para mi has sido la protección en estos meses, la tranquilidad de mi madre, la fortaleza de mi padre, el amor de mi marido, la amistad de quienes van llegando a mi vida y el cariño de quienes me esperan y acompañan…

Esta navidad también celebro tu vida… porque sin ti, no creería y no confiaría… no me atrevería…

Me he portado bien sabes? Al menos eso creo…

Cada dia doy lo mejor de mi en esta etapa donde soy pareja, sumisa y compañía de un hombre maravilloso.

Este año he tratado de estrechar lazos que en otros momentos no valoré…

He querido escuchar mas y decir menos.

He respirado profundo muchas veces, evitando herir con mis palabras, alejándome del conflicto, aprendiendo que también es valido ceder…

Y podría decir que me he portado tan bien que quiero pedirte mis regalos… mi recompensa al esfuerzo.. ese por el que luchamos todo el año…

Pero esta navidad no quiero dinero ni cosas materiales…

Quiero salud y amor para mi familia…

Quiero prosperidad para mis amigos y para mi país que está tan herido

Quiero paciencia para mi y montones para ese hombre a quien fácilmente se la agoto.

Quiero compromiso y honestidad en cada una de mis decisiones.

Quiero que podamos reconocer las oportunidades, que aprendamos a dejar  con nosotros a aquellos que nos aportan y a dejar en el camino a quienes nos dividen y desgastan.

Quiero fortaleza para los momentos difíciles y que no se acabe mi fe cuando vengas los días grises, quiero confiar y creer aunque haya nubarrones, lluvia o tormentas…

Ve por mis ojos mi querido niño Jesus.. que tu inocencia evite que juzgue equivocadamente, que tu pureza me mantenga fiel a mis deseos y a mis sueños.

Ve por mis ojos y muéstrame aquello que a veces no quiero ver… No me dejes perderme en mi egoísmo, que mis pensamientos no se vuelvan el laberinto que me ahogue sino que sean mi herramienta para respirar y crear.

No dejes que olvide que en la humildad de un pesebre nació un niño que cambio el mundo… y que desde la humildad de mi historia yo también puedo marcar la diferencia.

Quiero soñar y creer, quiero sentir, quiero amar… quiero ser mejor, pero no quiero dejar de ser…

Esta navidad despertare nostálgica, lo sé… pero no olvidare agradecer cuando mire a mi lado y encuentre mi regalo… regalo que cada día me sorprende con un detalle lleno de amor que llena mi mundo y sostiene mi vida… 

Gracias por tantas cosas buenas...

A ustedes que me leen, que me acompañan, que me escriben, que van conociendome cada dia un poco mas a traves de mis palabras y que estan ahi para apoyar, aconsejar, preguntar o simplemente leerme y sonreir en silencio... Gracias!

Mi mayor deseo es que esta fiesta nos traiga el amor por las cosas las sencillas, por los detalles de la vida, por las sonrisas, por la inocencia y por la confianza... Que esta navidad podamos volver a ser niños y creer, soñar y sentir con tanta pureza... 

FELIZ NAVIDAD!!