Bienvenida la luz....

Cómo explicar que sencillamente descubrí un manantial de felicidad dentro de mí misma...

Muchos detalles que antes pasaba por alto, hoy alimentan el manantial que me nutre... el cambio es de adentro hacia afuera... así debió ser...
Todo está igual... y sin embargo es tan distinto...

Es como una habitación que estuvo mucho tiempo en penumbras y de pronto se abren las ventanas y la luz ilumina los detalles que antes se escondían. El brillo dorado del marco del espejo, los detalles de la hermosa lámpara al lado de la cama, las flores talladas con sumo cuidado en la cabecera, los bordes de aquel portarretrato que sostiene un bello recuerdo hecho eternidad, los destellos del atrapasueños con finos espejos que aleja las pesadillas, incluso las motas de polvo que danzan con el aire...

También puedo ver la huella de un golpe contra la puerta, pero descubro que realmente la abolladura no es tan grande, veo algunos vidrios en el piso, testigos de una pelea que ya olvidé, la foto un poco arrugada de ése que no quería olvidar, pero que ya no significa nada... Me aferré a tantas cosas tontas... me asusté de la sombra en la pared y ahora descubro que era el papel arrugado que una vez envolvió un regalo pero que ya no necesito...

Me probé mil zapatillas de cristal... ofrecí mi pie a príncipes, lores, reyes y plebeyos... pero no soy cenicienta y mi vida no es un cuento de hadas...

Soy Verónica, una hermosa mujer sumisa que tiene todas las características de una princesa... inteligente, hábil con las manos (y con la boca XD), divertida... capaz de representar muy bien a su Rey y decidida a ser fiel a sus sueños... Una princesa que se cansó de la soledad de la torre del castillo olvidado... y decidió que el mundo real es demasiado hermoso para verlo desde lo alto...

La habitación que ahora tiene las ventanas abiertas se llama autoestima, y los muchos Lord Farquaad que habían pasado por allí tomaban de ella lo que necesitaban para estimular sus maltrechos egos y disimular sus complejos... dejándola en apariencia, cada vez mas vacía... Ahora la luz recupera sus colores y devuelve vida a los rincones... la motas de polvo vuelan divertidas a medida que todo vuelve a ponerse en su lugar y aunque siempre habrán amenazas, los vidrios que ahora envuelven el balcón son especiales... hechos de sueños y pasos firmes son traslúcidos y resistentes, permiten que la luz se derrame y caliente el espacio, y en los días grises protege de la lluvia y el viento... pero siempre, siempre dejan ver lo que hay mas allá...

Vale la pena... cada segundo que ha pasado vale la pena...

Feliz fin de semana